“Canelo” Álvarez vence a Scull y se mantiene como campeón supermediano
El pugilista mexicano fue eclipsado por la pobre exhibición de su rival cubano que optó por una estrategia evasiva dando un espectáculo muy pobre. El mexicano terminó venciendo por decisión unánime con tarjetas de 115-113, 119-109 y 116-112 recuperando el título del FIB.
Amado, odiado pero siempre mencionado. Saúl “Canelo” Álvarez salió avante una vez más como el mejor de los supermedianos, sin embargo, pese al triunfo ante el cubano William Scull el resultado no lo dejó contento ni a él ni a nadie ante un pobre espectáculo ofrecido en el millonario oasis de Arabia Saudita.
Lo que fue el debut del boxeo mexicano en el ambicioso proyecto deportivo del poder árabe quedó muy lejos de la gloria que suele ofrecer el nivel en Estados Unidos sobre todo en el marco del 5 de Mayo, fecha especial para Puebla y México.
La pelea de Saúl “Canelo” Álvarez ofrecía ingredientes interesantes tomando en cuenta que estuvieron en juego sus tres títulos de supermedianos de la AMB, CMB y OMB, pues el de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) lo perdió por default al no defenderlo en tiempo y forma.
La presentación, visualmente espectacular tuvo la presencia musical de la mítica Celia Cruz por parte del cubano y del polémico Luis R. Márquez por parte del tapatío en una arena en notorio vacío tomando en cuenta que la pelea se hizo en plena madrugada del Medio Oriente.
Un mal augurio
El arranque de la pelea fue como en la mayoría de los combates, mucho análisis y muy pocos golpes cumpliendo con el pronóstico inicial sin imaginarse que esa sería la constante en un duelo que tendría muy poco que comentar.
El cubano tomó sus precauciones y la mejor forma de enfrentar al campeón de los supermedianos fue la más efectiva pero que atentó contra el espectáculo con muchos pasos hacia los costados y evitando a toda costa la confrontación.
Los siguientes dos episodios fueron un poco más de lo mismo, el mexicano trataba de hacer daño con su combinación de golpes pero William Scull mantenía el estilo de Floyd Mayweather Jr. de correr a las esquinas del cuadrilátero.
En el meridiano de la batalla en Medio Oriente, hubo esbozos de combate donde los dos pugilistas trataron de sorprender con ganchos y jabs que no generaban algún tipo de peligro en una pelea estelar que ya daba empezaba a generar bostezos.
Poco y nada
La agilidad del cubano empezó a causar molestia en la esquina del multicampeón tricolor, pues su entrenador Eddy Reinoso no tenía en el escenario un rival tan escurridizo comenzando a sacar un lenguaje florido qué ya iba de la mano con la sensación de frustración en aumento.
Producto de los pocos golpes otorgados, Saúl “Canelo ” Álvarez empezó a verse impaciente al revivir un escenario desfavorable como el sucedido hace una década ante “Money” Mayweather solo que en esta ocasión se veía con la ligera ventaja con los jueces.
En el quinto episodio el cubano ofreció cierta resistencia dejando un par de “recuerdos” al tapatío sin generar un peligro considerable mientras que la ansiedad ya invadía al tricolor por no doblegar al adversario qué no mostraba credenciales suficientes para dar la campanada en suelo árabe.
Avanzaban los rounds en Riad y el aficionado al boxeo veía con desdicha una paupérrima exhibición donde William Scull se jugaba el prestigio con una clase suprema de escapismo al huir de todos los poderosos golpes del campeón mundial de los supermedianos.
Triunfo sin brillo
El ritmo cansino se mantuvo en los siguientes rounds, pues el cubano tenía una gran condición física que le permitía huir de un extremo a otro del cuadrilátero siendo constante y notoria la molestia de “Canelo” por no llegar al nocaut.
La recta final de la batalla en Arabia Saudita fue en favor mexicano que puso todo su esfuerzo en tratar de acorralaron a su rival sin poder conseguirlo pero le permitió convencer a los jueces de llevarse la victoria en un duelo por demás descafeinado.
Tras concluir los doce episodios, los jueces decidieron darle la victoria a Saúl “Canelo” Álvarez por decisión unánime con tarjetas oficiales de 115-113, 119-109 y 116-112 convirtiéndose en campeón mundial absoluto de los supermedianos, pues recuperó el cinturón de la FIB.
Justo después de su victoria se anunció que el mexicano defenderá sus títulos que espera ante uno de los mejores peleadores del momento, Terence Crawford el próximo 12 de septiembre en Las Vegas, Nevada.
Finalmente, el pugilista tapatío pidió disculpas a la afición al boxeo por el pobre espectáculo ofrecido “raspando” al rival por mencionar que no era posible dar una buena pelea si no había dos hombres dispuestos a pelear.
Poder mexicano en Medio Oriente
La función del “Canelo” Álvarez sirvió para impulsar a otros peleadores nacionales como la vitrina ante el mundo del pugilismo destacando a Marco Verde y Jaime Munguía.
En el caso del sinaloense “Green”, medallista de plata en el boxeo de los Juegos Olímpicos París 2024 debutó como profesional con el pie derecho superando de forma contundente al regiomontano Michel Galván Polina en apenas 44 segundos.
Por su parte, Jaime Munguía, tuvo su revancha ante el francés Bruno Surace con el triunfo por decisión unánime recuperando el honor que había perdido en su propio hogar en diciembre pasado cuando cayó por vía del KO.
