Ricardo Salinas: una voz razonable que deberíamos escuchar

Hace algunos días, el podcaster Roberto Martínez publicó en su canal de YouTube una
interesante conversación que sostuvo con el empresario mexicano Ricardo Salinas
Pliego. En ella, este exitoso hombre de negocios y propietario de empresas como
Elektra y Televisión Azteca, abordó distintos tópicos, mismos que incluyeron opiniones
sobre los rubros político, social, educativo y futbolístico, entre otros.

Ricardo Salinas Pliego es voz autorizada para hablar de futbol. Él, de manera abierta,
ha declarado que el “pinche futbol” le ha traído más problemas que beneficios, sin
embargo, su discurso franco y áspero, en muchas ocasiones, tiene una alta dosis de
razón. Y es que, a decir verdad, como sucede con él, uno no tiene que ser aficionado o
apasionado del futbol para comprender aquello que en México no se hace bien.

Incluso, considero que el no tener apego por lo que pasa en la cancha le da una visión
más objetiva de lo que sucede en ella y fuera de ella.

El dueño de TV Azteca y el Club Mazatlán sabe de futbol, esto a pesar de que sus
detractores (que dudo que sepan lo que bien sabe él) opinen lo contrario; a él no le
interesan formaciones ni tácticas y no tendrían que interesarle porque ese tema es de
jugadores y sus entrenadores; él, uno de los hombres fuertes del futbol mexicano, sabe
de lo que adolece este deporte en nuestro país.

Ricardo Salinas Pliego considera que los salarios están por las nubes; él, experto en
cómo hacer rentable un negocio, sabe que casi ningún club en México podrá
sostenerse a mediano plazo si no se establece un tope de inversión. Sé que, si esto
algún día se propone, Tigres y Rayados, acostumbrados a gastar, inconformes estarán,
sin embargo, la idea de Salinas parece ser la mejor.

¿Por qué?

Porque el futbol se encareció de tal manera que, cada vez con más frecuencia, se está
haciendo incosteable la manutención de un equipo y los gastos operativos que mes con
mes incluyen gastos de varios millones de pesos. Si esta medida no se toma en cuenta
y se abre al debate entre propietarios de clubes mexicanos no será extraño que en un
futuro cercano varios equipos de interés regional como Necaxa, Querétaro, San Luis y
Puebla, entre otros, estén en riesgo de desaparecer. Cada día las nóminas son más
onerosas y, también, cada día los ingresos son menores.

Otro de los puntos que abordó Ricardo Salinas Pliego se refiere a la posibilidad de
mantener a los equipos fuera del descenso. Claro está que algunos analistas y
exfutbolistas convertidos en comentaristas con una silla en las mesas de debate
televisivo dirán que con esa medida el nivel del futbol nacional irá a la baja y que, con
ello, se evitará dar castigo al equipo que no hizo lo que tenía que hacer en la cancha;
dirán, porque buenos son para mirar lo que sucede alrededor pero no para ser críticos
de su entorno, que evitar el ascenso y descenso dañará la competencia deportiva y sus
valores, sin embargo, ellos están en un error porque este futbol, el nuestro, el
profesional, como debería ser una obviedad, se rige por dinero, por inversión, por
sostenibilidad.

Este futbol no es uno que se juega en el llano; este futbol se juega en grandes estadios
y, para hacerlo sostenible, bien podría pensarse en la idea de Ricardo Salinas. Y es
que, si lo pensamos un momento, quizá si se establece un tope de inversión y si se
elimina en definitiva el descenso, los propietarios podrían reducir el riesgo de perder su
dinero y, con más calma y margen de maniobra, hacer crecer sus proyectos.
Las ideas de Ricardo Salinas son disruptivas, pero, también, plagadas están con una
alta dosis de razón y realidad.