Nuria Diosdado, la “jefa” de los Juegos Centroamericanos

La máxima ganadora de medallas de oro en la historia de los Juegos Centroamericanos y del Caribe es mexicana y se llama Nuria Diosdado.

La especialista en natación artística (nado sincronizado) logró la marca en estos Juegos de San Salvador, que para su deporte, dieron cerrojazo la tarde del miércoles y amable, como siempre, compartió su sentir con los lectores de GRADA.

El Centro Deportivo “El Polvorín” fue el lugar en donde se hizo historia y en donde, la capitana del equipo mexicano llegó a 18 medallas doradas. ¡Todo un récord!

“Se siente mucho orgullo. La verdad es que me hace darme cuenta de los años que he estado en este deporte, pero sobre todo, que no lo he hecho sola. Muchas de estas medallas pasan por mis compañeras, en dueto y los equipos que han pasado en este proceso. He cambiado desde mis primeros hasta ahorita. Hay un abismo entre una Nuria y otra, pero lo que no ha cambiado es la pasión por lo que hago”, comentó.

Las grandes historias no se forjan de la noche a la mañana, son consecuencia de muchos años de inversión, tiempo, dinero, entrega, pasión y mucho carácter.

Son cinco las ediciones de Centroamericanos en los que Nuria ha participado y en cada uno de ellos ha dejado huella. Desde el inicio en Cartagena 2006, pasando por el turbulento Mayagüez 2010, el regreso triunfal en Veracruz 2014, la brillantez en Barranquilla 2018 y la consagración ahora en El Salvador, la sirena tapatía, formó una imagen fiel a la de una atleta de gran categoría.

Para una competidora de su nivel, los retos y luchas con su propio ser son constantes, y debe tener un gran manejo emocional para controlar, por ejemplo, el clásico ‘Nuria siempre debe ganar’.

“No es fácil. La verdad es que te tienes que mentalizar en que las cosas no siempre salen como esperas. 

“Trabajamos mucho en pensar que todo pasa por algo. Bloqueo los comentarios que no me favorecen, porque sí existe un estrés, vienes con una carga de responsabilidad. Cosas positivas, esas son las que ayudan”, agregó.

Los juegos de Mayagüez, y ella así lo reconoce, son un parteaguas, los Juegos en donde se definió la persona y deportista que quería ser.

“Esos juegos vienen a ser una parte muy importante en mi carrera. Gano siete medallas de oro y se me retiran por un dopaje positivo. Yo me veía fuera, hoy tendría 25 medallas, ese momento fue el llamado para crecer, Veracruz fue la revancha. Pensé que Barranquilla serían los últimos y mira, aquí estoy, con la certeza de que son los últimos y con estas medallas históricas”, aseveró.

El ejemplo arrastra, las acciones cuentan y dejan escuela. Nuria es espejo para muchas niñas que empiezan su carrera y claramente, quieren ser como ella.

“Eso me encanta. Verme reflejada en ellas, en las niñas que empiezan y están abriendo sus historias, están llenas de talento y veo un futuro muy bueno, me da gusto saber que cuando las líderes ya no estemos, seguro no vamos a hacer falta porque ellas vienen muy bien trabajadas para llegar a tener experiencia”, puntualizó.

Nuria Diosdado es amable, atenta, educada, nunca niega una foto, una firma o entrevista; sabe que las grandes figuras del deporte trascienden por sus logros pero sobre todo, por su calidad humana.

Nuria es medalla de oro en los dos escenarios.