A Cuartos de Final con show de Arozarena
Arozarena superó las ochos carreras que había remolcado Jorge Cantú en la primera edición del Clásico Mundial, en 2006. "Los aficionados me hacen feliz cada vez que me aplauden, cada vez que corean mi nombre. Me hace jugar al cien por cien de mi capacidad", señaló el pelotero mexicano.
Con un portento bateo, México venció de manera contundente 10-3 a Canadá en el último encuentro de la fase de Grupo C celebrado en Phoenix, Arizona, consiguiendo su boleto como primero de grupo para los Cuartos de Final del Clásico Mundial de Béisbol.
Comandados por Randy Arozarena y Rowdy Téllez, la selección nacional de béisbol comenzó a tambor batiente desde la primera entrada cuando consiguió sus dos primeras carreras, pero en la parte baja Canadá respondió con un cuadrangular de Otto López para colocar el 2-1 en el luminoso.
De nueva cuenta, México tomó ventaja en el segundo inning cuando un doblete de Arozarena impulsó una carrera que anotó Austin Barnes, pero "Bo" Naylor por segundo partido consecutivo conectó un rompecercas y acercó a la novena canadiense 3-2 en la cuarta entrada del partido.
Sin embargo, los dirigidos por el manager Benjamín Gil no quitaron el pie del pedal y en el sexto episodio Arozarena bateó un doble con tres en base que impulsó tres carreras más ampliando la diferencia a 6-2 en favor del combinado tricolor.
Con el encuentro prácticamente decidido, Edouard Julien le agregó más dolor a la derrota canadiense con un jonrón para el 9-3 y a minutos del final Rowdy Téllez sentenció el 10-3 final también con un vuelacerca.
Arozarena, el hombre del momento
"Los aficionados me hacen feliz cada vez que me aplauden, cada vez que corean mi nombre. Me hace jugar al cien por cien de mi capacidad".
En cuatro partidos de la fase de grupos, Arozarena, que nació en Cuba y se nacionalizó mexicano en 2022, se fue de 7 por 14 con seis hits y nueve carreras impulsadas, estas últimas estableciendo un récord en el Clásico Mundial de Béisbol.
Habiendo hecho su debut oficial con la selección nacional hace menos de una semana, Arozarena ya se ha convertido en algo parecido a un héroe popular, provocando el júbilo del público con sólo pisar la caja de bateo.
Y es que no es nada nuevo que cuando los reflectores se posan sobre su dorsal, el jugador de 28 años saca lo mejor de sí mismo. Para prueba, un botón: en la campaña en la que Tampa Bay llegó a la Serie Mundial de 2020, bateó 10 jonrones en 18 partidos a partir de la Serie de División, en los que logró un promedio de .362/.429/.812 en ese lapso.
El Dato
Arozarena superó las ochos carreras que había remolcado Jorge Cantú en la primera edición del Clásico Mundial en 2006.