Guerreros de Puebla, batallando en el sinuoso camino de TDP
El director técnico y operativo de este club, Gaspar Andrade, resalta las dificultades que deben sobrellevar los equipos de Tercera División, que va desde falta de apoyos hasta poca promoción.
La Tercera División Profesional de México está llena de dificultades para los clubes que se aventuran a formar parte de esta categoría, pues entre falta de apoyos y de promoción, deben sostenerse “con sus propias uñas” para lograr que decenas de jóvenes aspiren a llegar al fútbol profesional.
Ese es el caso del club Guerreros de Puebla, que bajo el mando de Gaspar Andrade, director técnico y operativo, ha sorteado diversas dificultades para mantenerse firme en la categoría, logrando ser uno de los equipos que más da oportunidad a nuevos talentos.
En entrevista con GRADA, Gaspar destaca que Guerreros de Puebla nació en Cholula y asciende del nivel semiprofesional al profesional, viviendo 4 años muy complicados. De estos, dos han sido bajo su mando, en los cuales ha tratado de mantener a flote este proyecto.
“Tercera División es el rincón profesional menos visto y con una mayor base de jóvenes de México, aproximadamente 300 equipos; al menos 10,000 jugadores mexicanos con sueños y expectativas de llegar al fútbol que todos soñamos”, dijo
Destacó que una de las grandes problemáticas es el tema económico-administrativo, pues en Tercera División muchas veces se confunde el negocio con la formación y el negocio con el deporte, destacando que no cualquier asume la responsabilidad de llevar un equipo de TDP.
“Si no entendemos que fútbol es un proceso, estamos perdidos. En ese proceso sabemos que hay jóvenes que no están para recibir un sueldo. En estos dos años que llevo al equipo operativamente, ya me hubiera comprado un auto. No cualquiera lo hace, a lo mejor lo hacemos los locos”, destacó.
En este sentido, reveló que cada juego de local significa un gasto aproximado de 15 mil pesos, gasto que corre por cuenta del club, de los padres y de algún patrocinador que se tenga; sobre todo porque no se cuenta con apoyo gubernamental para estos equipos.
“No recibimos apoyo ni del gobierno ni de los ayuntamientos. Nosotros tenemos que pagar la renta de canchas para juegos, para entrenamientos. Las metas de cada club son distintas. Hay clubes que invierten dos millones de pesos al año y buscan campeonar, eso es parte de la ilusión o el ego de los dueños”, señaló.
Al tiempo de destacar que la gran satisfacción que se puede llevar personalmente es ver a un jugador formado en Guerreros llegar al profesionalismo, Gaspar Andrade resaltó que este club es el que más minutos brindó a jóvenes el año pasado, algo de lo que pocos o nadie habla.
“Guerreros de Puebla, no me quiero equivocar, debutamos más de 30 chicos, fuimos el equipo que a nivel nacional más minutos brindó a los menores y eso nadie lo dice, pero la crítica acá fue el que nunca ganó, el que siempre pierde. El objetivo no solo es ganar, también hay que formar”, finalizó.