Liga MX: entre ridículos y sorpresas
En nuestro hermoso fútbol podemos disfrutar de algunos momentos sublimes de trato a la pelota y de otros muchos más que ni el guión de la película de comedia más graciosa nos ofrece.
La liga MX, sin duda, contiene peculiaridades extras a las que el fútbol mismo nos puede dar, pero como son el pan de cada día, solamente son una anécdota más. En nuestro hermoso fútbol podemos disfrutar de algunos momentos sublimes de trato a la pelota y de otros muchos más que ni el guión de la película de comedia más graciosa nos ofrece.
Solamente de los cuartos de final actuales podemos contar la redención de dos delanteros que andan a los tumbos pero que se encuentran el gol y su equipo sigue el camino ansiado al campeonato; la resurección número 9 mil y el ridículo número 9 mil uno del equipo más mexicano; que un jugador mediano con un mal pasado de chiva (y estrella de los memes fallando penales) ahora encuentre una ‘re-hechura’ en Ciudad Universitaria y lo tachen casi casi de Dios renacido; la esperanza enfranjada que duró, como diría mi estimado Joaquín Sabina, “lo que dura un pez de hielo en un whiskey on the rocks”; verificar nuevamente que el dinero no compra ni talento ni las ganas de ganar, sobre todo si visten de rayado y que ahí mismo se vuelve a desenmascarar a un entrenador muy malo con la suerte de contratos millonarios por dirigir a equipos que no son de su nivel.
También vimos a un equipo compacto que hizo lo necesario para echar a los pinguinos del norte de manera sobria; unos felinos que humillaron a unas chivas que pensaban en la final y ni de cuartos pudieron pasar; otros felinos, estos con rayas, que hicieron valer lo que más pesa en su identidad: la localía; y unos felinos melenudos que llegaron casi derrotados al Azteca, la teoría de “Nico y el laburo” se quedará por siempre y para siempre en temporadas de 17 fechas, después del juego 18 se resetea la configuración de DT exitoso.
Entre Águilas y Leones pudimos ver una serie discreta, no vistosa pero que fue eficiente para los de Coapa y que a pesar de tener varios momentos de respuesta intensa de los leoneses, su incapacidad para tomar estos y hacerlos efectivos en el marcador indicó su ruta de salida de la etapa final del torneo. Larcamón sigue sufriendo los partidos definitorios, sigue pasmado en la táctica y la respuesta de acción inmediata para ganar los juegos.
Entre los del Atleti y los Rayados el resultado fue obvio ante la estrategia de los de San Luis y la enésima falta de voluntad de unos jugadores sobrepagados y un entrenador que fracasa con lo que sea que tenga. El “Tano” es capaz de hacer jugar mal al mismísimo Manchester City. Por su parte los cuasi naturalizados españoles hicieron una eliminatoria sobria, simple y eficiente, encontraron el triunfo en casa y luego fueron sin desesperarse a buscar el pase al norte.
Entre Chivas y Pumas, el partido de la redención, el partido donde el otrora “grande” del fútbol mexicano renacerá eliminando a otro “grande”, al final ni uno ni otro, dos equipos medianos (para chicos) tratando de avanzar con muy poco talento y nivel en una llave que forzosamente debía dar un ganador.
Entre Camoteros y Tigres se dio lo que en su inicio parecía la eliminatoria más dispareja de los cuartos de final, un equipo grande, con dinero y plantilla para poner a competir 2 equipos contra uno que a duras penas completa la alineación del cuadro. Tigres jugó la eliminatoria a consciencia, empatar de visita y ganarlo en casa. En ningún momento se vió en riesgo su pase a pesar del corazón poblano que se vió durante 90 minutos en la Angelópolis y luego se dejó de latir tal vez en el vuelo a tierras norteñas.
Las semifinales que hoy nos toca esperar son interesantes, sobre todo por lo que puedan hacer los equipos locales en el primer encuentro, sacar ventaja e incomodar a los que pareciera destinados a jugar la gran final.
San Luis es peligroso porque no tienen algo que perder y mucho que ganar. Ya hicieron más de lo esperado, así que cualquier resultado ahora es ganancia. Llegaron a semifinales cuando habitualmente están entre el lugar 6 y 12. América debe entender que las últimas muchas liguillas donde no han podido redondear con título son lecciones (que hoy deberían ser muy bien aprendidas) de cómo no echar a la basura 17 jornadas.
Pumas con lo que pueda presionar al rival en Ciudad Universitaria, debe buscar el triunfo con buena ventaja de goles para llegar al Volcán con expectativas de pase. Tigres, renuente a su historia, debe no hacerse chiquito en CU y trabajar un marcador a modo para la vuelta.
Emocionantes semifinales que podrían dar una final sorpresiva si San Luis y Pumas lo deciden así.
Y recuerden, la pelota siempre al 10.