Jessica Sobrino y el espectáculo de la natación artística mexicana
“Estamos preparando acrobacias nuevas, tratando de subir el grado de dificultad. Serán meses muy cansados, pero ya nos dimos cuenta que vamos por el camino correcto y estamos haciendo las cosas bien”, agregó la atleta mexicana, rumbo a París 2024.
Cuando en la pantalla del complejo acuático de Santiago 2023 apareció la calificación que daba el boleto al equipo mexicano de natación artística a los Juegos Olímpicos, las sirenas explotaron en júbilo y sus miradas brillaban como la más grande estrella. Acababan de lograr el objetivo: París 2024.
Una de ellas fue Jessica Sobrino, la acróbata de la escuadra y una de las integrantes más activas del grupo, su mirada reflejaba emoción y júbilo por lo que acababan de lograr, regresar a México al escenario de unos Juegos Olímpicos, 28 años después se la última experiencia (Atlanta 96).
La actualidad
Seis meses y una hilera de medallas después, el panorama luce halagador, el equipo se desarrolla cada vez mejor y Jessica se vuelve base en el desarrollo de las rutinas.
“Estamos contentas por regresar con estos resultados, dos medallas de oro que representan un premio al trabajo de todo el equipo, somos 10 niñas que estamos trabajando por este sueño. Sin cada una de ellas no sería posible”, señaló.
Una de las claves para el éxito de sus espectaculares rutinas es el alto grado de dificultad que manejan y por lo mismo, la casi exacta ejecución que aplican.
“Estamos felices de ver que subir el grado de dificultad a las rutinas dio frutos, estamos en lo más alto ahorita, sabemos que tenemos que seguir trabajando porque en las siguientes Copas del Mundo y los Juegos, se vienen el triple de difícil”, agregó.
Las rivales ya las estudian
Y es que tras los buenos resultados, ganaron dos medallas de oro en la pasada Copa del Mundo de París, los demás equipos las tienen más presentes que nunca y obviamente, incrementarán su dificultad y mejorarán sus rutinas para equilibrar esa competencia.
“Todos los países se van a poner a trabajar más y eso compromete a todas a tener meses de mucha más fuerza en los entrenamientos”, señaló.
Dentro de los ajustes que tienen en mente, se incluirán más vuelos que la misma Jessica realiza y así hacer más fuerte y novedosa su presentación.
“Estamos preparando acrobacias nuevas, tratando de subir el grado de dificultad. Íbamos a implementar una nueva cargada para esta ocasión, pero la vamos a esperar para la siguiente Copa del Mundo. Serán meses muy cansados, pero ya nos dimos cuenta que vamos por el camino correcto y estamos haciendo las cosas bien”, agregó.
Jessica al igual que sus compañeras, ya vivieron el ambiente olímpico tras competir precisamente en la alberca en donde se realizarán los Juegos, la satisfacción de haber ganado ahí es muy grande.
“Fue muy importante para nosotros estar en esta alberca, ver cómo va a funcionar todo y ubicarnos, y además ganar estas dos medallas fue muy satisfactorio”, aseveró.
Finalmente, Sobrino Mizrahi sabe que aún falta tiempo y trabajo pensando que vendrá la presentación de la rutina libre en la próxima oportunidad, pues las medallas en Francia fueron con la técnica y la acrobática.
“Va a ser complicado porque todos los países se van a poner a trabajar, porque ya vieron nuestro grado de dificultad y van a intentar superarlo, entonces hay que perfeccionarla. Será muy importante que seamos consistentes en las tres rutinas”, puntualizó.
El equipo mexicano tiene por delante las Copas del Mundo en Canadá y Budapest, en donde cerrarán su preparación de cara a los Juegos Olímpicos.