Entrevista: "Me quería retirar con el Puebla", asegura Antony Silva

Cinco torneos bastaron para que los aficionados del Club Puebla convirtieran a Antony Silva en uno de los porteros favoritos en la historia del equipo y, con ello, lamentar su inesperada salida de la institución, misma con la que el arquero paraguayo, en algún momento, pensó retirarse.

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Así lo reveló el propio “Santony” en charla exclusiva con GRADA, después de confirmarse su salida de la Franja: 

“(pensar en retirarse en Puebla) Sí, en un momento sí, no lo voy a negar. Yo siempre vi que era un lugar en el mundo para mí y mi familia. Considerábamos en un futuro que podíamos residir (en Puebla), muchas cosas que el momento del club te hace pensar”. 

“El futbol es muy momentáneo, era como un proyecto de vida. Soy consciente que tenía un contrato, tenía pensado el otro año… Todo era así, mi proyecto era eso, pero hay que entender que hay cambios... La maleta del futbolista siempre está del lado de la puerta, y uno sabe y la familia lo sabe. A veces puede ser muy bueno, a veces no tan bueno. Los cambios pueden acontecer, como pasó ahora”.

Consciente de dicha situación, Silva aceptó la decisión del entrenador Eduardo Arce Peña y la directiva enfranjada. Sin embargo, en las últimas semanas, comunicadores y medios afines a los altos mandos del club difundieron versiones sobre un “mal comportamiento” del paraguayo, agregando que Arce no era el primero en pedir su salida por esta situación, sino que incluso, el argentino Nicolás Larcamón ya lo había hecho con anterioridad, un rumor que le causó confusión y por el cual contactó al ex director técnico de la Franja.

"No te voy a negar que me llegó la información y me causó gracia. Como que ya se estaba yendo por otros lugares, donde no sé quiénes y ni por qué se hace eso. Era obvio que se iba a buscar la manera de poder cuadrar mi salida. Creo que era muy fácil decir: ‘Antony no entra en planes porque no me gusta” y punto; yo soy así”.

“Cuando salió eso, yo hablé con Larcamón y me dijo: ‘Antony, no puedo creer que me estés llamando’. Yo tuve vergüenza, pero me quedó esa sensación de que esto sea así. Me dijo: ‘Antony, fuiste capitán del equipo todo el torneo, si no te quisiera, te lo digo’. ¡Y Nico te lo dice! Teníamos la misma edad, cargos distintos, hay un respeto, pero cuando nos hablamos era a la cara y de frente”. 

Relación con Arce “era normal"

El actual director técnico del Puebla, Eduardo Arce, fue auxiliar en la etapa de Nicolás Larcamón y Antony Silva explicó que la relación con él era normal, se saludaban “y nada más”. El rol del portero en esa época, y cuando Arce asumió como primer entrenador, fue de líder en el vestidor y respeto a la autoridad del estratega. 

“Eduardo tenía su cargo en el cuerpo técnico de Nicolás. No era una relación muy fluida, sí estaba en el cuerpo técnico siempre él, obviamente era una relación respetuosa, normal, y no era más que eso. Ni pasaba para allá, ni tampoco sin saludar; o sea, era: ‘Hola, buenos días’. Me daba algunos conceptos cuando se hacía un trabajo. Normal”, apuntó Silva.

“Mi relación con Eduardo era así, normal. Transmitía cosas que no me gustaban como la situación del campo, del juego, pero a nivel general jamás me voy a meter en el trabajo de un entrenador. Porque vi que hubo comentarios de eso también, y no es verdad; no tengo esa forma de trabajo. Por más que yo tenga más vivencia de futbol que él, tiene un cargo y eso se tiene que respetar y siempre lo hice, te lo puede decir”, agregó.

“¿Situaciones de juego, de campo? La verdad nunca me metí porque me pagan para jugar y atajar. Situaciones de vestuario: corregir cosas de un compañero que, qué sé yo, no llega a tiempo… No sé, hay muchísimos casos. El ‘Papo’ Araujo siempre necesitaba que la gente lo acompañara, por su juventud, y era un tipo que muchos lo queríamos para que funcione”, finalizó.

Puebla se queda en su corazón

A decir de Silva, los dos años y medio que vivió defendiendo los colores blanquiazules le dejarán una marca difícil de borrar en su corazón, tanto por la importancia del club como la manera en que la ciudad lo arropó a él y a su familia.

"Muy agradecido y orgulloso de haber podido ser parte de un club con mucha historia y tradición. Con mucha gente que disfrutaba los momentos buenos y nos hicieron sentir y ver que nos querían, porque el estadio se llenaba y la gente salía llorando de alegría. El cariño que le tengo a la gente de Puebla se va a quedar acá para siempre, nunca se borrará".

Sin ser capaz de encontrar las palabras correctas, el excapitán enfranjado quiso cerrar con un agradecimiento, "a toda la gente, por cómo nos trataron a mí y a mi familia. En muy pocos lugares me han tratado tan bien como aquí. Se me quedan en el corazón".