Amor a la camiseta
Las diferencias entre la Selección de Brasil y los mexicanos son grandes en todos los aspectos, pero esto aún no define nada y queda todo un Mundial para saber si realmente la convocatoria fue la correcta.
Estamos a tan sólo unos días de iniciar el Mundial de Qatar 2022 y algunas selecciones ya tienen definido a los elementos que representarán a su país en esta edición de la Copa del Mundo, como el caso de Brasil, que dio a la luz su lista de convocados a través de una conferencia de prensa transmitida en todo el país.
En redes sociales eran publicados los videos de las reacciones de los futbolistas que representarán a la “verde-amárela”; en ellos se les mostraba nerviosos, ansiosos y con la incertidumbre de si estuviesen en esa lista de 26 jugadores que lucharán para coronarse campeones del mundo.
Uno de los videos que más llamó la atención fue el de Pedro Guilherme Abreu dos Santos, jugador del Flamengo, que reunió a toda su familia y amigos para ver la conferencia. De la mano, en silencio y atentos a las palabras del técnico de Brasil Adenor Leonardo Bacchi o mejor conocido como “Tite”, dijo el nombre del jugador.
La primera reacción del delantero fue abrazar a su prometida y soltarse en un mar de lágrimas por el momento que estaba viviendo. Más tarde, sus seres queridos se unieron al festejo con cánticos y abrazos para el seleccionado que, sin duda alguna, está viviendo un sueño.
Pero está reacción no sólo se dio por parte de Pedro, sino también por otros futbolistas como Antony, que no pudo contener las lágrimas; Alex Telles, que se mostró impactado por la noticia; Richarlison del Tottenham, que festejó con su familia y Neymar, que abrazó a su hijo.
La decisión para el entrenador de Brasil fue difícil debido a los prospectos que tenía en las diferentes posiciones. En el caso de la delantera, con el llamado de Pedro, Roberto Firmino del Liverpool y Gabriel Barbosa del Flamengo de la Serie A abandonaron el sueño de ir a Qatar.
Ahora los de Brasil llegan con ventaja a la vigésimo segunda edición de la Copa del Mundo y no me refiero a la plantilla –que, por cierto, es de las más costosas y de renombre en el fútbol; ni tampoco a las cinco Copas que ha ganado este país. Hoy Brasil tiene algo mucho más valioso que todo lo mencionado anteriormente y son jugadores que sienten la camiseta y que pelearon su puesto.
Esto no quiere decir que no hay jugadores que ya tuvieran su lugar asegurado como el caso de Vinicius, Neymar y Casemiro. Pero sí hubo ‘pelea’ y no puestos asegurados en la mayoría de los llamados.
Una situación diferente a la Selección Mexicana, en la que el director técnico Gerardo Martino –mejor conocido como el “Tata” –,tenía su lista de convocados para el Mundial meses antes y con puestos asegurados como el caso de Rogelio Funes Mori, Jesús Gallardo, Carlos Rodríguez, entre otros.
Pero esto no solo se trata del entrenador, sino también de los jugadores que no se muestran sorprendidos, sin emoción, sin ilusiones por este Mundial. Más bien son un grupo que en su mayoría sabía que iba a viajar al Medio Oriente, sin importar su momento futbolístico o, incluso, su estado físico, como es el caso de algunos de los convocados mexicanos.
No hay llanto, no hay sorpresas; solo hay un conjunto armado desde meses atrás y un gran número de futbolistas que se encuentran conformes y respaldados por el “Tata”.
Sin duda alguna, las diferencias entre la Selección de Brasil y los mexicanos son grandes en todos los aspectos, pero esto aún no define nada y queda todo un Mundial para saber si realmente la convocatoria fue la correcta. Y lo más importante: demostrar su amor a la camiseta.
