Asturiano, una de las leyendas del pancracio poblano
En exclusiva para GRADA, charlamos con el luchador poblano, sobre sus orígenes en el ámbito de la Lucha Libre de la mano de su familia, su actualidad, sus planes para hacer crecer esta disciplina y sus proyectos como maestro de Cultura Física y Deporte.
Por: Omar Escalante.
Cuando se habla de una de las estrellas consolidadas en el ámbito luchístico de Puebla, no se puede dejar a un lado al Asturiano, un talentoso luchador que empezó ‘picando piedra’ y que, pese a su corta edad, ha dado de qué hablar y ha llamado la atención de varias promociones.
En exclusiva para GRADA, charlamos con el luchador poblano, sobre cómo fueron sus orígenes, su actualidad, sus planes y su faceta como maestro de Cultura Física.
Omar Escalante: Empecemos con su opinión de que la lucha libre está tomando mayor relevancia en el estado.
Asturiano: Creo que no se le había dado la importancia que merecía la lucha libre poblana, ni la oportunidad. Creo que había y ahorita hay buenos luchadores, y ahora que se da la oportunidad de estar yendo a diferentes plazas, están viendo la calidad del luchador poblano, que siempre se ha caracterizado por tener muy buena capacidad física. No ha demeritado en cada uno de los trabajos que se van forjando en diferentes encuentros.
OE: ¿Cómo se siente al ser reconocido por la afición como un gran talento poblano en otros estados?
A: Me siento bien. He viajado a Guadalajara, la Arena México y diferentes estados, pero realmente me siento muy bien, porque este no es trabajo de uno o dos años, nos hemos llevado un buen tiempo trabajando. A lo largo de mi carrera, llevo treinta tantos años en este ámbito de la lucha libre profesional.
OE: ¿Cómo surge el personaje del Asturiano?
A: Surge de parte de mi papá, por que mi papá fue con el que empezamos a trabajar e hicimos una tercia. Estábamos mi papá, mi hermano y yo, luchábamos como “Los Asturianos”. A lo largo del tiempo, mi papá dice: “Los dejo, abandonamos el personaje, me voy, ya no quiero seguir luchando”. Nos deja a mi hermano y a mí, llegamos a la Arena Puebla y nos dicen que decidamos… ¡Pues uno va de rudo y uno de técnico!
Mi hermano se inclina luego, luego por el rudo y yo dije, “yo sigo de técnico”. Yo estaba más chico y mi confección era más para volar, para andar haciendo movimientos gimnásticos y bueno, pues me quedo como técnico. Mi hermano abandona la lucha libre…bueno, no la abandona, tiene que ir a otro estado y se tiene que salir de la empresa. Yo me quedo como el único Asturiano. De una descendencia española, de hace muchos años, de ahí viene parte del nombre de Asturiano.
OE: ¿Cuándo debutó?
A: “Debuté un día del padre, un 16 de junio, por ahí, si tengo 48 años y yo debute a los 15… Entonces, échale cuentas.
OE: 33 años, más o menos…
A: Pues ya tiene, creo que por el 96, por ahí.
OE: ¿Al principio fue difícil escapar de la sombra de su familia o eso no influyó?
A: Sí, influyó muchísimo. Primero, mi papá es el Príncipe Rojo de los años 80, en la Arena Puebla. Y mi tío fue el Tarahumara de los años 90, en la Arena Puebla también. Entonces siempre ser “el hijo de”, ser “el sobrino de”, a veces te causa más polémica, más problemas; te quieren golpear más fuerte, para ver si “ de veras” esa es tu carrera o tu forma para llegar que no te costó, que no fue nada fácil. Me tocaba enfrentar a Espíritu Maligno, Mr Ráfaga, Bobby Jack, Black Tiger, y luego, a veces, eran luchas mano a mano. Ahí es donde tenías que medirte y demostrar que tenías la calidad y capacidad para poder enfrentar a luchadores de esa vieja escuela.
OE: ¿Cuál ha sido su mayor experiencia dentro de un cuadrilátero?
A: He tenido muchísimas. Una de mis mayores experiencias fue ganar la cabellera del Loco Max. Soy el luchador que tiene el mayor número de cabelleras ganadas en el estado de Puebla. Haciendo cuentas, he participado como en 7, 8 encuentros de cabelleras y siempre he salido avante.
Le he quitado la cabellera a Black Warrior, a Pequeño Black Warrior, a Espíritu Maligno, al Loco Max, a Mini Espectrito; he participado en jaula, cuando cayó la máscara de Mr Ráfaga; en triangular, cuando cayó la cabellera de Espíritu Maligno, cuando cayó la máscara de Carisma. Siempre he salido avante en esas luchas.
OE: ¿Tiene algún título o alguna máscara en mente? ¿O cuál es el siguiente reto para Asturiano?
A: Me gustaría participar otra vez, o enfrentarme… Yo sé que Stigma es técnico pero, ¿por qué no?, pelear por ese cinturón que trae ceñido en la cintura. Me tocó participar en ese torneo para sacar Campeón Superligero a nivel Nacional; entonces, ¿por qué no enfrentarme con Stigma? Sé que es un estilo técnico, que a lo mejor somos muy parecidos, pero en cuestión de ejecuciones, por ahí ‘le tiramos’.
OE: ¿A qué país le gustaría ir a luchar? Aunque no sea el mismo estilo que aquí en México.
A: Yo digo que, para culminar mi carrera, si yo voy a Japón, con eso me doy el gusto, me gustaría ir a Japón, a la New Japan. Para eso, creo que tenemos que seguir demostrando la calidad y la capacidad física, para desarrollarnos en la lucha libre y que lo vean los promotores, que lo vea la gente de la ciudad de México y para que también seamos proyectados a otro país.
OE: Como maestro de Cultura Física y Deporte, ¿piensa en algún momento de su carrera en formar nuevo talento?
A: Tengo por ahí un proyecto y ojalá que se realice, pero es un proyecto que realmente involucra muchas disciplinas. Me estoy asesorando muy bien, no quiero también adelantarme, no quiero ‘tirar las campanas al vuelo’, porque quiero que sea un proyecto bien fundamentado y lo quiero llevar a la Arena Puebla. Creo que siempre hablar de una institución como es el Consejo Mundial de Lucha Libre y que tenga una escuela como tal en la Arena Puebla, bien fundamentada, creo que sería de mejor calidad.
En este año estoy trabajando sobre un libro de entrenamiento deportivo de lucha libre, que no lo hay. Es un libro de lucha libre, entonces todo mundo cree que el luchador no está preparado y nos hemos dado a la tarea de hacer cosas diferentes y que podemos hacer ambas cosas, ser buenos deportistas y también ser buenos profesionistas.
OE: Un mensaje a las personas que incursionan en este mundo deportivo.
A: Primero, ser disciplinado, porque la disciplina es la base de todo. Que sigan sus objetivos, que cubran sus objetivos y que, realmente, esto no es ‘de la noche a la mañana’. La lucha libre es una carrera, hay que llevarla poco a poco; en dos meses no se aprende a ser luchador.
Para ser luchador, no dejas de aprender nunca. Yo sigo aprendiendo de muchos compañeros que suben conmigo, que sacan una llave nueva, o aprendo también viendo algún video, no dejo de aprender nunca. A la gente que puede leer esto, nunca dejen de aprender.
FRASES
“Había y ahorita hay buenos luchadores, y ahora que se da la oportunidad de estar yendo a diferentes plazas, están viendo la calidad del luchador poblano, que siempre se ha caracterizado por tener muy buena capacidad física”.
“Para ser luchador, no dejas de aprender nunca. Yo sigo aprendiendo de muchos compañeros. No dejo de aprender nunca”.
“¿Por qué no enfrentarme con Stigma? Sé que es un estilo técnico, que a lo mejor somos muy parecidos, pero en cuestión de ejecuciones, por ahí le tiramos”.