¿Qué fue de Álvaro 'Bola' González?
Álvaro Fabián González Pintos nació en Canelones, Uruguay, el 12 de septiembre de 1973. Su olfato goleador dejó un legado en Puebla que jamás podrá ser olvidado puesto que sus goles fueron, en gran medida, una de las razones por las que el Club Puebla regresó y se mantuvo en la Liga MX.
El 'Bola' desembarcó en el futbol mexicano vistiendo la playera de aquellos Pumas de Hugo Sánchez en 2002. Tras dos semestres en Ciudad Universitaria fue transferido a Dorados siendo ésta su primera experiencia en la Primera División 'A'. De Sinaloa pasó al hostil clima en el sur de México para defender por cinco torneos cortos los colores de los Lagartos de Tabasco, quienes dejaron de existir en el Clausura 2006 por problemas financieros.
Fue el domingo 6 de Agosto de 2006 cuando la vida de Álvaro y la institución camotera cambiarían para siempre. Su romance con el gol inició a los cuatro minutos de vestir la Franja por primera vez: un doblete para firmar el 3-3 ante Lobos BUAP.
Goles y más goles
A partir de entonces el regreso del Puebla a la Primera División se vio sostenido en gran manera por las anotaciones fabricadas por González. Más de treinta goles para que el futbol de Primera regresara al Estadio Cuauhtémoc.
Ya en el máximo circuito del balompie azteca el 'Bola' festejó 42 pirulos, de los cuales varios fueron esenciales para permanecer en la ahora Liga MX y vivir aquella histórica semifinal contra Pumas.
La vida después del Puebla
Su salida del equipo, como la de muchos jugadores de aquella camada, fue por problemas con la directiva encabezada por Ricardo Henaine. "Me fui más por ser amigo del ‘Chelís’, por estar cercano a él que por lo futbolístico", reconoció en su momento.
Después de ocho años de carrera en México, González regresó al futbol que lo vio nacer con la playera de Danubio FC."Estuve ahí un torneo corto, jugué con el 'Chino' Recoba", y explicó a GRADA que, "la verdad jugué poco y por eso me retiré. Me cansó".
Atrás quedaron los entrenamientos, viajes y concentraciones. A día de hoy, el Bola vive una vida "tranquila, sin estrés" y alejada del futbol competitivo. "No, futbol nada; solo atrás de mis hijos que juegan acá en Uruguay".
Para González, sus actuales goles son disfrutar de la familia y manejar su negocio de camiones, "que transportan ganado a los frigoríficos".