¿Por qué es importante hablar de negocios?
La intención es poder transmitirte todo lo que hay alrededor del deporte que es más que pasión: es negocio, desarrollo y estrategias.
Hace más de 20 años que el deporte dejó de apelar, desde los liderazgos, al romanticismo y a la esencia del juego. Ya no más. Lo sé, no es popular, lo lees y quizás hasta lo desestimes, pero déjame decirte que si crees que en el deporte lo que más importa es la pasión, estás equivocado. Como fan, sin duda es lo más relevante; sin embargo, para la industria deportiva es sólo un ingrediente y no lo más importante.
Si lo llegas a mirar de esa manera, créeme, podrás incluso disfrutarlo más.
Algunas instituciones, ligas o equipos han entendido esta nueva mirada como un todo, donde los proyectos deportivos son la punta de lanza del negocio; y otros, muchos, optaron por otros caminos para rentabilizar sus productos sin que esencialmente lo que ocurra en las canchas, arenas, cuadriláteros, albercas; etc., sea lo más relevante.
Lo que comprendió el barón Pierre de Coubertin, las dictaduras fascistas, nazis, africanas y latinoamericanas desde principios del siglo XX, lo vinieron a explotar –a mediados de los años 90 del siglo pasado –las empresas de una manera importante. El deporte es el embajador más fiel, leal y poderoso que existe en este planeta.
Hoy el deporte se convirtió en entretenimiento. Por eso hoy es posible que Cristiano Ronaldo cobre por un post en redes sociales no menos que 3.8 millones de dólares; que Pelé o Maradona se hayan cotizado menos que Gareth Bale o que el Manchester United haya pagado 100 millones de euros por un delantero que no ha sido relevante en el futbol mundial como Antony.
¿Qué ocurrió? ¿Por qué el deporte dejó de ser sólo pasión y romanticismo?
Si bien es cierto que los negocios entre empresas y el deporte data de los años 70, como cuando Puma pagó 1 millón de dólares a Pelé para que calzara en el Mundial de México sus zapatillas, lo cierto es que Nike y Adidas fueron las primeras que vieron en el deporte todo el potencial comercial que tenía.
Desde la primera versión de los tenis Jordan; el comercial de “Los mejores del mundo vs demonios” de Nike; la sociedad de Adidas con la FIFA, la industria observó el negocio multimillonario que puede ser el deporte. Luego, las grandes corporaciones de medios comenzaron a pagar millonarias cifras por los derechos de transmisión como en la NFL, NBA o la Premier League.
Hoy ninguna decisión deportiva está exenta del escrutinio financiero. Si es viable como negocio avanza sin debate; si no es realizable, aunque tenga un gran sentido, con la pena, pero no pasa. ¿Está mal? Claro que tiene su lado muy negativo también, pero la pandemia de la COVID-19 también dio un giro: colocó al fan en primera posición y eso obligó a todos los involucrados a mejorar los productos.
Y así es como todo comenzó a tomar forma. Ejemplo actual: de las 22 ligas más importantes de Europa, 15 campeones de la temporada pasada tuvieron la plantilla más valorada de su país y ninguno de todos los clubes analizados estuvo fuera del top-4. Así es el peso de la plata ahora mismo. Ver casos como el del Leicester City hace algunos años es, hoy en día, una rareza; y siendo honestos, no pasa, ni sucederá constantemente.
Por eso es relevante entender lo que ocurre detrás de los vestidores, que es donde en realidad se toman las decisiones más relevantes del deporte. No es que no importe lo que ocurra en las canchas, pero ya no es lo único.
Esta columna tendrá como objetivo ayudar –o intentar –a interpretar el ecosistema del negocio, la tecnología, las nuevas tendencias y plataformas que han permitido transformar el deporte como nunca lo imaginamos.
Si te dijera que un data scientist tiene las respuestas para que una selección sea campeona del mundo, quizás sueltes una carcajada o me tires de a loco. Pero en algunos clubes del mundo, lo que diga uno de ellos resulta relevante para los cuerpos técnicos.
La intención es poder transmitirte todo lo que hay alrededor del deporte que es más que pasión: es negocio, desarrollo y estrategias. Buscamos que sea más que nada un explainer para comprender y seas un smart fan.
Espero que te gusten las historias que te contaremos.