GRADA Opinión

Maestros involuntarios

Al igual que cualquier motor, al ser humano le cuesta arrancar y, además del café, el ejercicio es un excelente estimulante tanto para el cuerpo como para la mente; superar los esfuerzos necesarios que representa el ejercicio matutino te prepara a la perfección para afrontar la verdadera “batalla”.

Isidro
Isidro Sánchez

Actualizado: 17 OCT 2022 - 2:34

Maestros involuntarios
Arte: GRADA

La mayoría de las personas que realizan, sin recibir retribución económica, alguna práctica deportiva, además de buscar el placer implícito en la actividad, lo hacen por salud física, bienestar, prevenir enfermedades y así mantenerse fuertes y con vigor.

Pocas veces nos detenemos para analizar los múltiples beneficios que el deporte tiene en la psique, todo lo relacionado con la fortaleza mental. Hoy me gustaría escribir sobre las principales enseñanzas que he obtenido del ejercicio, entendido como “el conjunto de movimientos corporales que se realizan para mantener o mejorar la forma física”, en mi práctica casi siempre individuales.

Como lo dijo Séneca: “Trata al cuerpo de forma rigurosa, así no será desobediente ante la mente”.

Ante los múltiples desafíos que se nos presentan día a día, todas las ocasiones que somos tentados a tomar el “camino corto” de la gratificación instantánea, tenemos que estar listos y dispuestos, y de igual forma que el cuerpo se entrena, la mente debe de estar preparada para afrontar estas decisiones con la lucidez y determinación necesaria.

Desde hace tiempo tengo el hábito de realizar ejercicio temprano por la mañana, esto genera una sensación de control, predisposición, “gol de vestidor”, para aventajar al día y los desafíos que pueda presentar.

Al igual que cualquier motor, al ser humano le cuesta arrancar y, además del café, el ejercicio es un excelente estimulante tanto para el cuerpo como para la mente; superar los esfuerzos necesarios que representa el ejercicio matutino te prepara a la perfección para afrontar la verdadera “batalla”. A lo largo del día el caos está presente, soy consciente que hay múltiples situaciones que están fuera de mi control, pero la estructura que me da, desde una noche antes, el realizar ejercicio por la mañana me da la sensación de “Isidro 1-0 El día” y así poder comenzar a disfrutar.

De la natación, para mí el mayor ejemplo de meditación en movimiento, he aprendido a mantener la atención en mí. “La vista en tu carril”, como suelo repetirme cuando el nadador de junto pasa a mi lado a mayor velocidad.

Sobre el autor

Isidro Sánchez
Isidro Sánchez

Director Técnico con licencia UEFA A. Maestro en Psicología del Deporte.