¿Es profesional la mejor liga de México?

Mucho se ha dicho respecto a la falta de organización y transparencia que manifiesta, prácticamente en cualquier decisión, la Federación Mexicana de Futbol y el Comité de Selecciones Nacionales.

Semanas han pasado, mucha tinta se ha regado en diarios y muchos comentarios se han emitido sobre los yerros continuos que presentan los señores que toman las decisiones en el futbol mexicano y, sobre todo, de aquellos que las acatan y que, posteriormente, las califican como un gran cambio estructural.

Esta ocasión, en esta columna, no profundizaré en dicho tema. Hoy, en contraste, expondré (porque también se debe hacer mención de lo que se hace bien) un caso contrario al señalado en la parte introductoria.

En la columna de este viernes le comentaré algunas cosas que deben saber sobre la mejor liga de todo el deporte mexicano, tanto del rubro amateur como profesional. Hoy, en GRADA, abordaré la labor que lleva a cabo la Liga de la Asociación de Basquetbol Estudiantil.

La Liga ABE cumple una década de existencia y, como lo expondré a continuación, es ejemplo de que en México, si se quiere, si se toman decisiones benéficas en lo grupal y si se trabaja con jóvenes, las cosas pueden salir muy bien.

La Liga ABE es un circuito que cuenta con dos categorías en ambas ramas: División 1 y División 2.

En la primera se hallan los equipos más competitivos del país, tanto de instituciones privadas como públicas; de tal manera que en el circuito élite, en un partido de temporada oficial, puedes encontrar lo mismo a los Pumas de la UNAM que a los Borregos Salvajes del Tec de Monterrey. Y en la categoría de ascenso se encuentran los conjuntos que, temporada tras temporada, compiten por dar un salto de calidad y el brinco definitivo a la División 1.

Uno podría pensar que por tratarse de una liga colegial, en la ABE no habría mayor grado de presión. Sin embargo, porque el deporte estudiantil también es formativo, la presión bien entendida se halla en todos los equipos durante todos los días: mientras unos apuestan por llegar a las finales vía su ubicación en los primeros lugares de la clasificación, otros se esfuerzan día a día para ser mejores y, con ello, evitar los sitios más bajos del standing.

Por otra parte, debo mencionar que en esta liga hay descenso. ¡Sí, en la Liga ABE hay descenso!

Además, lo que no debo pasar por alto al señalar es que en este torneo, donde se halla el mejor nivel del deporte ráfaga en México, no se premia a la mediocridad puesto que no hay reclasificación, repechaje o como se le quiera llamar al acto de brindar segundas oportunidades de alcanzar la postemporada a aquellos que no hicieron lo necesario para lograrlo.

Finalmente, pero no menos importante, está el lineamiento de avance académico. Y es que los basquetbolistas estudiantiles no tienen como prioridad la actividad en las canchas, puesto que su rubro de más importancia se halla en las aulas, de tal manera que, para jugar, primero deben aprobar.

Si quieres conocer más de la Liga ABE, harías bien en asistir a las finales: los Ocho Grandes. La fase final del torneo en donde se premiará al mejor equipo de la rama varonil y femenil se llevará a cabo en un sitio con mucha historia: El Nido de UPAEP, gimnasio en el que, como plus de interés, podría contar con la presencia de equipos poblanos como Tigres Blancos UMAD, Halcones Inter, Borregos Salvajes Puebla, Aztecas UDLAP y las anfitrionas Águilas UPAEP.