Tercer Grado Deportivo, una mesa periodística donde no abundan periodistas

No tenía dudas y no las tengo ahora; Televisa es una empresa que sabe cómo es su negocio, cómo convertir debilidades en fortalezas y, sobre todo, cómo hacer contenidos que impacten de una manera contundente a grandes audiencias. Por eso y muchas cosas más, Televisa es líder en materia televisiva en habla hispana.

Ellos, los directivos y operativos de la “gran fábrica de sueños”, se niegan a perder más terreno del que ya les han robado las plataformas digitales y, por ello, a partir de abril, apostarán por un concepto que, si funciona, será el referente del análisis deportivo rumbo a la Copa del Mundo de 2026.

Menciono esto porque recién se anunció que en la barra de programas nocturnos de la empresa que lidera Emilio Azcárraga Jean, pronto se estrenará Tercer Grado Deportivo, el cual tiene su simiente en Tercer Grado, ese programa de análisis que, sobre todo durante la última campaña presidencial, dio una gran vitrina a los actores políticos y sociales de este país para que estos, como bien saben, articularan promesas baratas al por mayor.

¿Recuerda aquella noche en donde Denise Maerker criticó de manera sorpresiva (porque ella jamás habla de futbol) a la Selección Mexicana tras el papelón en Qatar 2022? Pues bien, sucede que ese comentario, extrañísimo porque la extitular del programa nocturno de noticias de Televisa no aborda temas deportivos, fue aclamado por las personas que sí siguen el deporte y, en específico, el futbol. Aquel comentario y la respuesta favorable que generó en la audiencia resultaron ser una especie de sondeo para medir qué tan viable sería producir un Tercer Grado distante a la política y cercano al deporte.

Así que, a partir de abril, en lugar de Joaquín López Dóriga, Carlos Loret de Mola, Carlos Marín y Leopoldo Gómez, en la pantalla de Televisa podremos ver y escuchar los rostros y los comentarios de personajes como Javier Alarcón, Alejandro de la Rosa, André Marín y David Faitelson, todos dispuestos a charlar en una mesa de análisis que estará moderada por Denise Maerker.

La idea, en apariencia, luce bien. Sin embargo, tengo muchas dudas respecto a la frontalidad y transparencia con la que se abordarán ciertos temas. Y es que, para empezar, la titular de dicha emisión pertenece a Televisa, empresa que, como ya quedó claro, no apostó a una reestructuración del futbol mexicano, sino a una permanencia del sistema que tanto ha lastimado a nuestro balompié. ¿Criticarán la labor de Azcárraga como el verdadero dueño del futbol mexicano? ¿Criticarán a Alejandro Irarragorri, socio comercial de Azcárraga y Salinas Pliego?

Además, lo que no es poca cosa, la mesa de análisis carece de periodismo puro porque sus integrantes no son periodistas, sino comunicadores. Y es que David Faitelson y André Marín hace mucho que no hacen periodismo porque a lo que se dedican es a comentar, no a investigar y, cuando medianamente lo hacen, suele ser para defender los intereses de alguno de sus amigos, varios de ellos asiduos asistentes a los partidos de Pachuca y León. De Javier Alarcón mejor ni hablar; él narra, comenta y, como jefe de deportes, gestiona y administra recursos, pero no investiga y, mucho menos, se compromete.

Veremos cómo le va a este Tercer Grado Deportivo. Veremos si es una mesa de análisis sustentado en investigación periodística o si es otra de esas mesas plagadas de gente cercana al futbol que emite discursos con base en sus glorias pasadas. Yo me quedé con ganas de ver y escuchar en ese programa a Beatriz Pereyra o quizá a Ricardo Magallán, dos de los pocos periodistas deportivos que quedan en México.