¿La revolución del juego es mental?
Hoy, hablar de salud ya también implica sentirte bien y sano en el plano mental, que al final es el plano que acaba reflejando nuestro ser en el mundo, viviendo, así como nuestro ser con otrxs, conviviendo.
En la época de nuestrxs xadres (padres y madres en inclusivo), quizá ir a terapia o con lx psicólogx era medio mal visto, como si sólo fueran aquellxs que tienen un problema. Hoy ya es diferente.
Hoy, hablar de salud ya también implica sentirte bien y sano en el plano mental, que al final es el plano que acaba reflejando nuestro ser en el mundo, viviendo, así como nuestro ser con otrxs, conviviendo.
Y quizá en el futbol como en el deporte, una noción de salud mental basada en aptitudes o mecanismos de defensa o de solución emocional en entornos competitivos de mucha presión, está siendo cada vez más determinante.
Por eso es muy interesante lo que llevan haciendo en el TSG 1899 Hoffenheim de la Bundesliga desde hace ya varios años. Sus planteles varonil y femenil se encuentran en la primera división de la Bundesliga, pero montaron un laboratorio de investigación e innovación, el cual, basado en análisis de datos cognitivos y de comportamientos o respuestas psicológicas están revolucionando la forma de scoutear, entrenar, y formar tanto jugadorxs profesionales como entrenadorxs. Niklas Sule y Nagelsmann salieron de ahí.
Aún en el Hoffenheim, Niklas Sule el defensa gigante, pasó por un periodo de sobrepeso porque “no estaba bien” y se le fue la mano con comida chatarra. No obstante al interior pudo recomponer, perder los kilos de más, volverse impasable, y poner al Hoffenheim en lo alto de la Bundesliga. De ahí el Bayern Munich lo fichó y ganó de todo: una Champions, un Mundial de Clubes y 5 campeonatos de Alemania. Ahora está en el Borussia Dortmund.
Por su parte, Nagelsmann se convirtió en una revelación. Irrumpió como DT de la Bundesliga en el Hoffenheim con sólo 28 años, siendo el más joven en el certamen alemán. Después de tronarse el menisco y una segunda lesión grave de la rodilla en el Augsburg dirigido entonces por Tuchel a los 20 años, su carrera como jugador terminó abruptamente. Estudió negocios, pero se graduó de Ciencias del Deporte y entró como entrenador a las básicas del Hoffenheim.
Mientras dirigía, y auxiliaba, terminó por sacar sus licencias UEFA de entrenador, y cuando Huub Stevens renunció por razones de salud, le soltaron las riendas del equipo en primera división, en febrero de 2016. Justo en ese torneo Sule terminó por consagrarse como un defensa top, que saldría al Bayern Munich en 2017, y el Hoffenheim pasó del lugar 17 y poder descender, a terminar el torneo en 4to., sólo por detrás del Bayern Munich, RB Lepizig y el Borussia Dortmund.
Después, Nagelsmann llegaría al RB Lepizig y los llevaría a la semifinal de Champions con sólo 33 años. Es el DT más joven en alcanzar esa instancia. Por eso su llegada al Bayern Munich no fue sorpresa, aunque este torneo lo hayan corrido antes de acabar por miedo a perder el triplete. Un miedo que se les puede cumplir ahora con Tuchel al frente. De entrada ya quedaron fuera de Champions.
Pero el momento cumbre de Nagelsmann fue la decisión del Hoffenheim de encargarle salvarlos del descenso con “tan poca experiencia.” Sin embargo, gracias a la recolección de datos conductuales y de respuestas psicoemocionales que hacen, el Hoffenheim decidió subirlo a él porque creían –¿o sabían? –que podría manejar esa presión y salir airoso. Que mentalmente tenía lo necesario. No se equivocaron, trajeron al futbol de élite a un entrenador que a corta edad ya marcó huella, aunque habrá que ver cómo maneja este despido reciente.
En general, las revoluciones no encajan con todxs, por algo son revoluciones. Y quizá la de hoy en el futbol si tiene que ver con la salud mental, o eso se cree en Hoffenheim. Que la salud mental tiene componentes que se pueden medir, visorear, y entrenar.
Quizá Nagelsmann es el primero de su tipo, pero en unos años veremos más y más como él.