Sí: el Club Puebla es de otra liga

Hay cosas que por mayor esfuerzo que se haga no cambian. Es decir, se puede hacer un máximo esfuerzo, pero la diferencia de calidad siempre termina siendo determinante en los resultados, sobre todo en los deportivos.

Les cuento algo. Como muchos amantes del fútbol, quien escribe esta columna juega en un equipo de fútbol 7 los sábados. El equipo es un grupo de amigos que, créame, saltamos a la cancha con un ánimo mayúsculo, pero estamos en un nivel donde nos golean un juego sí y otro también.

No pasa nada, al final de cada partido brindamos y nos reímos como siempre, pues a final de cuentas es fútbol y estamos para divertirnos, algo que no se puede decir del fútbol profesional, pues en este les pagan por patear la pelota.

Y eso me lleva nuevamente a hablar de nuestro querido Club Puebla, que el pasado viernes fue literalmente paseado por los Pumas de la UNAM, que tras largos 7 años volvió a ganar en el Estadio Cuauhtémoc.

Puebla se topó con pared; esa es la realidad. No, esta vez no puedo hablar de falta de actitud o de correr los 90 minutos, está vez se tiene que decir que la Franja simplemente no pudo competir con los universitarios.

Esto nos lleva a decir que sí, el Puebla en estos momentos es de otra liga. De una muy inferior a la que se juega en otros estadios del fútbol mexicano. 

Hoy, el Puebla es el peor equipo de la Liga MX.

El esfuerzo está desde la salida de Eduardo Arce. El trabajo de Ricardo Carbajal está sobre la mesa, pero la calidad es inferior a lo que se esperaría de un equipo profesional. La Franja no tiene el plantel para competir.

Estimado aficionado, hay que esperar que en lo que resta del torneo el Puebla logre sacar uno que otro resultado positivo, pero esas esperanzas de repechaje deben dejarse de lado y la directiva, desde hoy, debe estar viendo la posibilidad de hacer de la Franja un equipo a nivel de una no muy competitiva Liga MX.